Semanas atrás, el gobierno nacional presentó una reforma que incluye a la Ley 60/90, el histórico régimen de incentivo fiscal que fomenta las inversiones de capital, tanto nacional como extranjero en el país.
Esta ley fue promulgada en 1990, con la finalidad principal de promover inversiones alineadas con la política económica y social del país, orientadas al aumento de la producción de bienes y servicios, la generación de empleo, el impulso a las exportaciones, la eficiencia productiva y la reinversión de utilidades.
Entre los beneficios que ofrece actualmente se incluyen:
- Exoneración de tributos aduaneros, internos, de inscripción, registro, y otros gravámenes sobre bienes de capital, materias primas, asistencia técnica, leasing, entre otros.
- Para inversiones desde el extranjero mayores a USD 5 millones, hay exoneración de impuesto sobre remesas y distribución de utilidades por hasta 10 años
Lo que propone la actualización
Los cambios más destacados son:
- Eliminación del Impuesto a la Distribución de Utilidades (IDU) para inversiones de origen nacional (antes sólo disponible para capital extranjero).
- Exoneración del Impuesto a la Renta de No Residentes (INR) sobre comisiones y recargos enviados al exterior.
- Facilidades para transferencia de bienes de capital entre beneficiarios, sin pago de impuestos, y habilitación del uso de estos como garantía en fideicomisos.
- Inclusión del sector de turismo y entretenimiento como beneficiario del régimen —parques temáticos, centros de diversión y otras atracciones podrán acceder a exoneraciones fiscales.
Cabe destacar que durante el primer semestre de 2025, las inversiones amparadas por la Ley 60/90 alcanzaron USD 266 millones, con un 80 % de capital paraguayo. Se aprobaron 82 nuevos proyectos, un incremento del 52 % con respecto al mismo periodo del año anterior, y se estiman 3.000 nuevos empleos, un aumento del 200 %.