Paraguay urge diversificar sus fuentes de energía de origen hídrico, señaló el exdirector de Itaipu margen brasileño, el Ing. Luiz Fernando Leone Vianna, durante un conversatorio, organizado la Cámara de Comercio Paraguay Brasil (CCPB) y la Fundación Desarrollo en Democracia (DENDE).
En su intervención; el Ing. Vianna, alertó que Paraguay está próximo a agotar sus fuentes energéticas, todas de origen hídrico, y urgió al país a diversificar su matriz con fuentes térmicas, solares, etc. “Brasil ya pasó por eso. Paraguay necesita, y tal vez ya con retraso, incorporar otras fuentes y un planeamiento eficaz”, afirmó. También señaló la importancia de desvincular la tarifa eléctrica del control inflacionario: “La tarifa debe cubrir los costos reales del sistema, no ser usada como herramienta económica”.
Del conversatorio titulado “Desafío Energético y Seguridad Energética: Una mirada desde la experiencia de Brasil”, participaron, además, el Ing. Ángel María Recalde, especialista paraguayo en política energética, con trayectoria como expresidente de la ANDE y exdirector de Yacyretá y moderó el diálogo el economista Alberto Acosta Garbarino. Se realizó el jueves 24 de julio, de 18:00 a 20:00, en el Tryp Hotel Asunción.
Leone Vianna sostuvo también que una lección importante aprendida en el Brasil y que puede ser aplicada en Paraguay, es la del marco regulatorio que tienen en su país. “Fue un marco regulatorio bien implantado por técnicos, que consiguió que las obras necesarias de generación y transmisión fueran construidas, y que posibilitó a las empresas tener una independencia tarifaria. Independencia del gobierno, pero una tarifa dependiendo solamente del órgano regulador que tiene que ser independiente”, dijo el actual directivo del Grupo Delta Energía.
A su turno, el Ing. Recalde, reconocido especialista paraguayo en política energética, subrayó la importancia de construir una estructura sólida y confiable en el sector eléctrico nacional, capaz de ofrecer garantías claras a potenciales inversionistas privados. Afirmó que actualmente el país carece de las condiciones necesarias para respaldar con seguridad las inversiones en el área energética.
“Nos falta una estructura de sector eléctrico confiable, en donde se tengan los elementos para que el privado se sienta respaldado en su inversión. No hay nada más cobarde que el capital, dicen, y es lógico y razonable”, expresó Recalde, remarcando que cualquier persona o empresa que decida apostar por el sector requerirá certezas sobre la estabilidad y el retorno de su inversión.
Recalde reiteró la necesidad de fortalecer instituciones clave del sistema eléctrico, como el operador nacional del sistema y los entes reguladores, para asegurar una gobernanza técnica y transparente. “No se trata solamente de decisiones políticas desde el Ministerio, sino de asegurar una base técnica sólida que dé confianza y previsibilidad al sector”, concluyó.
Sobre el futuro energético del país, por su parte, el economista Acosta afirmó que, pese al crecimiento sostenido de la demanda, la capacidad de generación se mantiene prácticamente igual desde hace más de cinco décadas, sin inversiones significativas desde la década del 60. El profesional recalcó la necesidad de dividir la ANDE y establecer un ente regulador independiente, tomando como referencia la experiencia brasileña con Electrobras. Según el economista, el problema principal no es técnico, sino político: “Faltó voluntad del Estado para encarar estas reformas, pero el riesgo de un apagón inminente podría acelerar los cambios que el país necesita con urgencia”.
Finalmente, hizo hincapié en el valor de un marco regulatorio sólido e independiente mencionado por Leone Vianna, recordando el modelo brasileño de 2004, que permitió inversiones sostenidas y autonomía tarifaria para el sector eléctrico. “El país creció de forma sostenida en los últimos 10 o 15 años, pero si no ajustamos nuestra planificación energética a esa realidad, podríamos quedarnos sin energía suficiente para sostener ese ritmo”, subrayó.
El presidente de la CCPB, Fabio Fustagno, también considera que es urgente diversificar la matriz energética y definir políticas públicas que aseguren una transición justa e inclusiva. “El caso de Brasil es un ejemplo cercano. Supieron enfrentar una crisis energética con una reconversión total del sistema: generación, transmisión, distribución y comercialización. Hoy tienen un mercado abierto al sector privado y una política energética sólida”.
Igualmente, agregó que Paraguay debe asumir un papel importante en la integración energética regional, aprovechando su posición geográfica estratégica y su liderazgo en generación de energía limpia: “Paraguay está en el medio de la región y es el país estrella en generación de energía limpia. Por lo tanto, debe tener un rol de liderazgo y un rol integrador. Necesitamos una política energética que nos permita integrarnos y aportar valor dentro de ese sistema regional”.
Para el titular de la CCPB una política energética moderna debe ser socialmente equitativa, asegurando que los beneficios del desarrollo lleguen a todos los sectores.
“Las comunidades más vulnerables muchas veces están alejadas de los centros urbanos, y quizás la mejor alternativa para ellas no sea la generación hidroeléctrica, como Itaipu o Yacyretá, sino opciones como la energía fotovoltaica, más accesible y adaptable a sus condiciones”, explicó. En ese sentido, remarcó la importancia de adaptar las soluciones energéticas a las realidades locales para lograr una cobertura más equitativa y sostenible.
Estuvieron presentes en el evento diplomáticos, autoridades paraguayas, legisladores y empresarios.